EL GlADIADOR
Después del combate
el gran gladiador
se marcho a las termas…
¡olía a sudor!
Se dio un baño frio
y el tibio mayor
y otro muy caliente
con mucho calor.
Le dieron masajes
y ungüentos de olor,
Quedó como nuevo y
se armo de valor…
Y se fue al banquete
que daba en su honor
la hija más pequeña
del emperador.